Nuggets de Pollo Saludables
- gaviriamarcela
- 25 abr
- 3 Min. de lectura

Es bien común, escuchar a mamás decir que su hijo, no come muchas cosas, que su variedad de alimentos es reducida, y con tal que coman algo, optan por opciones de ofertas de supermercado, que se asemejen a comidas rápidas. Priorizando la presentación y el "sabor" a costa de los valores nutricionales. Y la verdad las entiendo, yo también estuve en esa situación, cuando mis hijos eran pequeños.
Pero el mejor momento para cuidar la salud, no es solamente cuando tenemos en la puerta de nuestra casa una enfermedad crónica (diabetes, enfermedad coronaria, cáncer, etc.), sino desde el primer día de nuestra vida o incluso antes. Es sembrar hábitos y una salud fuerte, para prevenir situaciones futuras.
Hay un término que yo llamo "Tolerancia a los malos hábitos" y es esa flexibilidad en la gestión de una buena alimentación, la carencia de movimiento, o la falta de atención al estrés, entre otros, cuando estamos en un momento de la vida, donde nuestro cuerpo aún no emitido una alerta, que es cuando muchas personas dicen es momento de hacer un pare y reajustar el camino. Y esa "Tolerancia a los malos hábitos" es muy común, en niños. Como los vemos sanos, creemos que pueden comer indiscriminada mente todo tipo de alimento. Pero estamos llevando a prueba su cuerpo, poniendo en riesgo no solo su salud presente sino la futura.
Hoy en día, lastimosamente es cada día más común encontrar enfermedades crónicas que antes eran exclusivamente de adultos. Hoy vemos niños y jóvenes con hígado graso no alcohólico, cáncer de colon o una tendencia creciente de condiciones como obesidad, diabetes tipo 2 y hasta hipertensión.
Prestémosle atención a lo que comen nuestros hijos, no desde una forma obsesiva, pero sí de una forma consciente, especialmente teniendo claro los ingredientes de las principales comidas que les estamos ofreciendo. Si cuidamos lo que entra a casa, estamos cubriendo una gran parte de la alimentación que ellos consumen.
La receta que les quiero compartir el día de hoy, estoy segura que será del agrado, de todos, de quienes apenas comienzan en el camino de la alimentación saludable o quienes ya llevan un buen recorrido.
Ingredientes:

1 Pechuga de pollo entera
6 tajadas de pan sin gluten (para la miga)
1 cucharada de mostaza
2 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de vino blanco
Hierbas al gusto: Perejil, cilantro, albahaca, orégano.
1 diente de ajo
Bastones de zanahoria
Bastones de apio
Papa criolla
Miel de abejas cruda
Sal y pimienta al gusto
Procedimiento:
Empezamos haciendo nuestra miga de pan, para eso, en un horno tostador, vamos a poner las tajadas en el horno, una vez estén tostadas, las dejamos enfriar, y las podemos rallar o triturar. Reservamos la miga
Seguimos deshuesando la pechuga, y cortando la carne en cubos de 2cm x 2cm aproximadamente. Esos huesos que nos sobran los guardamos*
En una tabla, vamos a picar las hierbas, las agregamos a la licuadora o un tazón para procesar. Junto con el diente de ajo, la mostaza, el aceite de oliva, el vino blanco, sal y pimienta. Y adobamos el pollo con esa marinada. La idea es que queden adobado, pero no con exceso de líquido. Si te sobra marinada se puede guardar en la nevera, y dura varias semanas.
Dejamos reposar, el pollo al menos media hora. Luego de ese tiempo, lo pasamos por la miga de pan y los llevamos a la airfryer a 180oC por 20 minutos o hasta que los veamos dorados.
Cocinamos en agua hirviendo por un par de minutos unas papas criollas, escurrimos y con un poco de aceite de oliva, también llevamos a la airfryer.
Servimos nuestros Nuggets de pollo, junto con las papas, los bastones de zanahoria y apio. Y acompañamos con una miel mostaza.
*Nota: El hueso que queda del pollo, se puede congelar y cuando se tienen varios, en una olla con abundante agua, se pone a cocinar con sal, unas hojas de laurel, un diente de ajo, un tallo de apio y cebolla. Ese fondo, se guarda en el congelador en porciones, y se puede usar como base para sopas o salsas, en reemplazo de caldo de cubo
Commentaires